lunes, 22 de abril de 2013

TREN RIOBAMBA




El viaje en tren desde la ciudad de Riobamba es una experiencia única, cuyo recorrido atraviesa inigualables paisajes y diversidad cultural, donde podrá observar el rico tapiz de las cuidadosamente y bien cultivadas tierras andinas, contrastándose con lo basto y agreste del paisaje del páramo. El ferrocarril trasandino es una atracción espectacular para turistas nacionales y extranjeros, que quieren ver la variedad de climas y el escenario cultural y natural del valle central, que es conocido como la Avenida de los Volcanes.

 

Datos de interes

Cuidad: Riobamba
Sector: Centro
Dirección: Av. 10 de Agosto y Carabobo


 
 

Información de la Estacion del Ferrocarril

Durante el gobierno del Presidente Eloy Alfaro en 1895, empezó la construcción del “ferrocarril más difícil del mundo”, los técnicos que estuvieron a cargo de la obra fueron los norteamericanos Archer Harman y Edward Morely. La construcción del tren tenía como objetivo unir la costa con la sierra. El tren llegó a la ciudad de Alausí por vez primera en septiembre de 1902 y a Riobamba en julio de 1905.
La ruta Riobamba-Alausí-Sibambe-Alausí es una obra maestra de la ingeniería ferroviaria ya que permite al tren escalar una cuesta que va desde los 1800 metros hasta 2600 metros sobre el nivel del mar, el ferrocarril se desplaza hacia adelante y luego hacia atrás y zigzagueando por las rieles asciende y desciende una escarpada cumbre, por eso es catalogada como una de las mayores atracciones en el Ecuador y en la provincia de Chimborazo.







El tren parte desde la estación del ferrocarril en el centro de la ciudad de Riobamba, hacia la Nariz del Diablo, ubicada a 2346 metros sobre el nivel del mar., pasa por Cajabamba y las lagunas de Colta y el pueblo pequeño de Guamote, que cuenta con un paisaje inagotable y ofrece a los turistas cultura, folclor y artesanías que están presentes en la feria indígena, lugar donde se expenden y comercian los más diversos productos en un mosaico original propio de su cultura.
Más adelante, a espaldas del Chimborazo, el tren llega al reforestado desierto de Palmira, continuando con el viaje, el tren pasa prudente y cauto por la “Bola de Oro”, lugar lleno de leyendas y apariciones que asombran y estremecen a quien las escuchan.
Después se detiene en un pueblo pintoresco en la sierra, llamado Alausí para llevar a cientos de turistas que ávidos quieren ir a la estación de Sibambe para conocer el mayor recurso turístico del ferrocarril, la famosa Nariz del Diablo, obra monumental del siglo pasado que con un descenso en medio de una sorprendente solidez y aventura única descubre al tren más difícil del mundo.
Durante esta aventura el vértigo se apodera de los pasajeros, que son testigos de la hermosa vista que ofrece este balcón natural.